viernes, 22 de mayo de 2009

Milagro Haack (Venezuela)

S / P

"Detrás del nombre hay lo que no se nombra;
hoy he sentido gravitar su sombra”
Jorge Luis Borges


Un grano
alimenta el Girasol
por este silvestre día que me queda de vida

-Es tiempo de retirada por su velado augurio-

Un grano
alimenta a Saturno
por este líquido día que me queda de vida

-Es tiempo de salir de la herida agua por su oscuro remolino de voces-

Un grano
alimenta un Zafiro
por este orillo día que me queda de vida

-Es tiempo de ver su brillo, por el esconde su mirada en el pantano-

Un grano
alimenta el Alma
por este árbol día que me queda de vida

-Es tiempo de guardar lo callado
detrás de las puertas del postrero infinito
dando con el dictamen
lo blanco en piedra con oportuna flor-

Un grano
llena el Vacío
-aunque corto sea el aliento-
por este urbano día que me queda de vida

Su Palabra
Surge Vibrante Paciencia.

P / C

Por coserle
el cuello a una hoja
seduciendo la malla del viento
rodeando sólo el olor del jazmín

-Es tierra seca pero la piara busca el pasto-

Ellos

quemaron la mar
sola
por mi calle
y sólo les bastó clavar
un ojal por espantapájaros

dios
los escoltó

por recoserme
al escote que va hacia el pasto

C / U

Como el cielo derrama sus flores por la tierra,
vierto dentro de mi cáliz negro un vino color de rubí.
Omar Khayyam


Demasiado oscuro
el paso por la calle sin la iguana
preñada de piedras
para el viernes santo

Demasiado negro
cuando me labia
tu largo paseo con un café
todavía en la mano

Demasiado azabache
junto al rito cayendo por comparo
frío

solo
ayuno de marzo

sopla

Silencia
Brasa

M / C

“La palabra se escucha
entra, se queda, se va
¿Acantilado de vida, existencia, muerte?
Elizabeth Schön


Aguarda
el día no termina con un adiós en la mano izquierda

Indico
el Norte,
indico las coordenadas
por un silencio no de alma
mientras charlo con el Cosmos
anunciándote lo que corona

dice
dialoga con lo inesperado
no violes de lo bueno de la cúpula
abriéndote el infinito al mirarte en el espejo del otro

- los árboles verdaderos no dejan de ver su bosque-

Aquello del otro lado
muerde la mano del pan dado desde el inicio
mientras alcanzo lo callado en lo índigo
femenino
y
me aproximo a la belleza generosa de lo sencillo
del arenal que has talado pisando sólo el laberinto
gestando saga

- los árboles verdaderos no dejan de ver su bosque-

Comprendo.

N / C

El aire
dentro de este pronto

sólo

lo puedo acumular
por su giroscopio pensamiento
rijoso
encarando lo acuático a punto de caer
braceando con sus ojos
columpio ramaje piel
espejo

Lo demás
dios
es cáscara para el vacío.

R/N

“Don't give up
Because you want to be heard
If silence keeps you
I...I will break it for you”


Se reserva el muro del recuerdo

Escucha tu voz

-Eres dios y dios no llora
dios ama y no se oxida
aunque viva en espacios abrochando al silencio
mientras los tiempos son su imagen y semejanza
protegidos por ti, de mi-

Recuerda, él,
está
Allí
detrás de cualquier tragaluz
viéndote danzar
cuando
Cubres el muro del recuerdo
pensando en lo tornadizo de lo inmortal
en la queja de tierras cayendo por falta de pan
para llegar con la noche esa lágrima movediza
dando vuelta a la flor que en luna te deja,
donde ni tu, ni yo

Olvida la hierática penitencia

apareando
la sombra, lo oscuro, lo reprimido en su naturaleza

Atrayéndote –me- entresijo

Del libro inédito: Oratorio caracol en silencio

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